Allá por febrero comentaba la posibilidad de llegar al libro-plagio de la misma manera que habíamos visto una fuerte oleada en aplicaciones-plagio en sistemas de distribución digital, es decir, libros que se basaran en imitar títulos, nombres de autor, etc., para engañar al comprador incauto en la tienda digital y llevarse su pasta. Pues bien, ya hay gente cabreada porque eso está pasando en Amazon.