Contenido bajo demanda

Alquiler o suministro digital de audio, vídeo, videojuegos, etc., que se obtiene mediante sistemas de distribución a través de internet, como Netflix, o mediante integración en los servicios de dispositivos multimedia o consolas de videojuegos, entre otros. El coste del alquiler varía en función del tipo de contenido, pudiendo pagar por consumo (por cada contenido solicitado) o por suscripción (cuota fija periódica). El archivo se descarga completamente o se ejecuta por stream (es decir, por emisión digital). Pasado el tiempo de alquiler, el archivo puede volverse inútil, o ya no es posible retomar la emisión digital, utilizando restricciones mediante DRM.